Hospital CIMA Barcelona
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En el Hospital Sanitas CIMA contamos con la radiofrecuencia INDIBA y recomendamos su uso para el tratamiento de cicatrices de diferentes tipos, entre ellas las postquirúrgicas. La radiofrecuencia INDIBA representa una innovación con grandes beneficios en el campo de la medicina estética y la fisioterapia. Este método utiliza tecnología de radiofrecuencia avanzada para mejorar la apariencia de las cicatrices.
Las cicatrices que se pueden tratar pueden ser recientes o antiguas.
INDIBA consiste en la emisión de ondas de radiofrecuencia sobre las capas profundas de la piel, lo que genera una agradable sensación de calor que estimula las células de la piel y activa el proceso de curación y cicatrización natural. Es apto para diferentes tipos de cicatrices, entre ellas las cicarices hipertróficas y atróficas, ayudando a la curación y a la eliminación del enrojecimiento.
El objetivo es prevenir adherencias, favorecer la cicatrización, despegar los tejidos, disminuir la inflamación y los edemas.
Este procedimiento como hemos comentado anteriormente, no duele y no es invasivo, destaca por la suavidad de su aplicación en la piel, lo que lo hace adecuado para una amplio abanico de pacientes, sobre todo aquellos con cicatrices postquirúrgicas o cicatrices causadas por lesiones.
INDIBA no solo trabaja en la superficie de la piel, sino que actúa también a niveles más profundos, abordando las causas subyacentes de la formación de cicatrices.
Una de las principales ventajas de INDIBA para las cicatrices es que acelera el proceso de cicatrización. Su tecnología de vanguardia propicia una curación más rápida y eficiente de las heridas y cicatrices, ayudando a reducir la inflamación asociada con las cicatrices recientes, mejorando así su apariencia.
Otro aspecto importante es la capacidad de este método para minimizar la formación de cicatrices hipertróficas y queloides, que son preocupaciones comunes después de cirugías. Al mejorar la elasticidad y la textura de la piel, INDIBA asegura que las cicatrices se integren mejor con el tejido circundante, haciéndolas menos visibles.
A esto, además, hay que sumarle que los resultados de INDIBA son visibles desde las primeras sesiones.
El tratamiento con INDIBA puede iniciarse de manera segura aproximadamente 48 horas después de la intervención quirúrgica, pero todo depende de la cirugía, el estado de las cicatrices y del criterio médico.
Cicatrices de cirugías que se pueden tratar con INDIBA:
El tratamiento postquirúrgico con INDIBA no duele y puede resultar una experiencia placentera para los pacientes. La agradable sensación que genera en las zonas tratadas y su técnica de masaje suave, ayuda a que cicatrices tengan una recuperación más cómoda y rápida.
El número de sesiones de INDIBA sobre las cicatrices varía en función del tipo de cicatriz y de las necesidades del paciente, pero generalmente se recomiendan entre 6 y 12 sesiones. Eso sí, cada caso requiere una evaluación personalizada por parte del equipo de fisioterapia del Hospital Sanitas CIMA para determinar el número exacto de sesiones que son necesarias para lograr los resultados deseados.
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