La hipogalactia es la producción insuficiente de leche materna para satisfacer las necesidades nutricionales del bebé. Aunque es una preocupación común para muchas madres, en realidad la hipogalactia es menos frecuente de lo que se piensa. De hecho, en muchos casos se basa en percepciones erróneas que en una deficiencia real de producción de leche. Por eso es imprescindible saber identificar cuándo se trata realmente de un problema y cuando se está ante la necesidad de corregir la forma en la que se da de mamar al recién nacido. Solicita una consulta con el equipo de ginecología del Hospital CIMA.
Se la denomina como hipogalactia temporal porque el cuerpo no pierde la capacidad de generar leche materna, simplemente sufre un ligero retraso en el sistema de producción de este alimento esencial para los bebés.
Se trata de un fenómeno multifactorial :
La hipogalactia permanente puede deberse a afecciones como hipoplasia mamaria, donde hay un desarrollo insuficiente del tejido mamario, o a trastornos hormonales como el Síndrome de Ovarios Poliquísticos (SOP) o el hipotiroidismo. Estas condiciones de salud afectan la capacidad del cuerpo para producir leche materna. Además, algunas cirugías de reducción mamaria pueden derivar en una producción insuficiente de leche materna al reducirse tanto la grasa como el tejido mamario presente en el pecho.
El diagnóstico de hipogalactia se basa en la observación de signos como un bajo aumento de peso en el bebé o cambios en sus patrones de micción y de sus deposiciones, si se muestra letárgico muy inquieto y desconsolado.
Llegados a este punto, es determinante saber diferenciar entre una verdadera hipogalactia y una percepción errónea de insuficiencia de leche. Para ello, un profesional de la unidad de Pediatría del Hospital CIMA debe evaluar la situación con el objetivo de confirmar el diagnóstico y descartar la llamada "falsa hipogalactia", que puede estar relacionada con preocupaciones infundadas de la madre.
El tratamiento de la hipogalactia incluye técnicas de relactación, como la estimulación frecuente del pecho, preferiblemente con extracciones cortas y regulares.
Es importante que las madres reciban apoyo y asesoramiento personalizados por parte de profesionales de la salud y consultores de lactancia para manejar efectivamente este tipo de afección que, en buenas manos, puede tener muy fácil solución.
Las comadronas suelen dar un apoyo inestimable en estos casos.
Si la hipogalactia impide la lactancia materna exclusiva, existen alternativas como la lactancia mixta, combinando leche materna y de fórmula. La donación de leche materna es otra opción, pero es esencial mantener el contacto piel con piel y el vínculo emocional durante la alimentación, independientemente de cuál sea el método elegido para combatir la hipogalactia.
Estas alternativas aseguran que el bebé reciba la nutrición necesaria mientras se mantiene el vínculo afectivo entre madre e hijo, algo tan importante para el recién nacido como para su madre.
Todas las mujeres nacen con óvulos en sus ovarios, pero su cantidad es finita, lo que quiere decir que el número de óvulos va descendiendo hasta que terminan ...